En
el año de 1439 el Papa Eugenio IV aprueba la Cofradía de la Sagrada Correa de
Nuestro Padre San Agustín y Nuestra Madre Santa Mónica, conocida por la de los
“corrigiatos”, en la Iglesia
de Santiago el Mayor de la ciudad italiana de Bolonia. Posteriormente, en el
año 1490 el mismo Papa aprueba la creación de la Cofradia de Nuestra
Señora de la Consolación
en el mismo templo. En el año 1575, el Padre General de la Orden, con su autoridad ordinaria
unió la Cofradía
de Nuestra Señora de la
Consolación a la de los “corrigiatos” y la hizo una sola.
Este hecho fue ratificado por el Papa Gregorio XIII, quien se inscribe como
cofrade, y expide una Bula citada motu
proprio, confirmando la unión hecha por el Padre General, haciéndola
Archicofradía, que es lo mismo que cabeza de las demás Cofradías de la Correa
dándola muchos privilegios y gracias y no sólo para que las gozase sólo la
Archicofradía, sino todas las demás Cofradías de la Correa que a ésta agregase
el Rvdmo. Padre General de la
Orden.
Ya
en España han entrado en la
Ilustrísima Cofradía nuestros Reyes Católicos y el Arzobispo
de Toledo con toda la Corte. En el año de 1656 el Eminentísimo señor Cardenal
Sandoval. En el año de 1677 se inscribió como cofrade el infante Don Juan de
Austria. Posteriormente se inscribieron la Reina de España Doña
Ana María de Austria, madre del Rey de España Carlos II, quien se ciñó con
mucha devoción la correa y persuadió al Rey su hijo para que la ciñese.
Aunque la veneración a la Virgen
de la Consolación es antigua en los conventos Agustinos esta Real
Archicofradía, unida a la de la Sagrada Correa de San Agustín, se reorganiza
cuando los PP. Recoletos reciben, en los primeros días (día 10) de febrero de
1899, la administración de la iglesia del Corpus Christi, vulgo de los
Hospitalicos, en la calle de Elvira, a instancias del Excmo. Sr. D. Isidoro
Pérez de Herrasti y Pérez de Herrasti, Conde de Antillón, Hermano Mayor de la
Hermandad de la Paz y Caridad, según aparece en el Libro 1º de Cosas Notables.
Así mismo, en dicho libro, se indica que en el año 1905 se revitaliza la
antigua que estaba establecida en el Convento de Nuestra Señora de Loreto, y
cuyo primer título fue la de San Juan Evangelista, del Albayzín y que se perdió
con la desamortización de Mendizábal en 1836, nombrando Junta Directiva. A
finales de Agosto de 1906 aparece el anuncio de los cultos de la misma.
Asimismo, en el libro editado en
el año 1923 en Monachil titulado “Discurso-Memoria sobre la Venerable Orden
Tercera de San Agustín en el quinto aniversario de su fundación en Granada” en
la página 12 dice: “Desde el feliz regreso de nuestros queridos hermanos, los
PP. Agustinos Recoletos, a esta ciudad de Granada en las postrimerías del
pasado siglo, cualquier observador pudo
notar al resurgir glorioso de una antigua asociación mariana casi
muerta, de que ellos se hicieron inmediatamente cargo: la Real y Pontificia
Archicofradía de Ntra. Sra. de la Consolación y Sagrada Correa de S. Agustín,
fundada y dirigida por nuestros antiguos hermanos, traída y llevada por
distintas Iglesias, después de la exclaustración de los religiosos, afincada
por último en la de nuestras hermanas, las Agustinas Recoletas de la Magdalena
y mantenida a flote, aunque con vida lánguida, por el esfuerzo de aquel
benemérito Sacerdote granadino, amparador de toda obra buena, celoso
propagandista de las glorias de María y amantísimo de todas las Órdenes
religiosas, D. Manuel Arcoya.”
“Esta cofradía de la Sda. Correa
de N.P.San Agustín, fundada hace siglos en Granada, trasladose a nuestra
Iglesia luego de llegar los PP. Agustinos, y se abrió un libro para apuntar las
nuevas socias que iba ingresando en la cofradía. Pero faltaba organizarla
nombrando una Junta Directiva, compuesta de Presidenta, Tesorera, Secretaria y
Celadoras de Coros y esto último se llevó a cabo en junio de este año… Pasan de cincuenta las cofrades que han
ingresado después de la organización; se han fundado trece coros de diez o
quince cofrades cada uno; mensualmente o al año contribuyen todas con una cuota
libre y asisten religiosamente a las Juntas, Comuniones Grales. Y Procesión de
la Sagrada Correa, llevando el Sto. Escapulario.” (Libro 1º de Cosas Notables
páginas 21 y 22 año 1909).
Año 1910. “La Cofradía de la
Stma. Virgen de la Consolación y Correa, organizada el año ppdo. ha recibido
mayor incremento ingresando sesenta y cuatro socias o cofrades.” (Libro 1º de
Cosas Notables página 30).
Los principales cultos se
realizaban a finales de agosto para festejar el día que la Iglesia dedica a San
Agustín. Estos cultos comenzaban, a principios del siglo, con una novena que se
iniciaba el 24 de ese mes y finalizaba con una función dedicada ante el altar
de su “patrona”, la Virgen de la Consolación el primer domingo de Septiembre,
en la que se ganaban indulgencias. Al finalizar la función se celebraba una
procesión, que unas veces discurría por los claustros del convento y otras, por
los alrededores de la iglesia y que terminaba con una vela a la Virgen.
Aparte de estos cultos anuales,
los cofrades de La Virgen de la Consolación y de la Sagrada Correa de San
Agustín celebraban cultos los últimos domingos de todos los meses.
Las imágenes de la Virgen de la
Consolación y de San Agustín que veneraba la Archicofradía, actualmente se
encuentran en sus primitivos altares situados a la derecha y a la izquierda del
crucero de la iglesia del Corpus Christi (Hospitalicos). Las imágenes de la
Virgen de la Consolación y de San Agustín se encargaron al valenciano Francisco
Font Blanch en 1900 y al joven, entonces, escultor, José Navas Parejo en 1905,
vecino de la iglesia, respectivamente.
“En junio de1911, al terminar el
solemne novenario al Santísimo Sacramento, que la Cofradía del Buen Pastor,
recientemente fundada en esta iglesia celebró para inaugurar su fundación y
honrar al Santísimo”. (Libro 1º de Cosas Notables, página 35). “La Pía Unión de
las Almas bajo el patrocinio de San Nicolás de Tolentino, que se había fundado en esta iglesia poco
antes tuvo su inauguración solemne, al comenzar el mes de Noviembre, que se
celebró un devoto Novenario de Almas y quedó constituida la Pía Unión…” (Libro
1º de Cosas Notables, pág. 39).
La Archicofradía mantiene los cultos de manera regular y continuada hasta el díade hoy, manifestando
su devoción y ternura al Santísimo Sacramento del Altar, a Ntra. Señora de la
Consolación y a Ntro. PadreSan Agustín.